7/19/2020

¿Cómo adorar a Dios? Lo que enseñó Jesús de Nazaret

La forma más elevada de la alabanza es la obediencia

Comencemos por decir que la adoración está reservada sólo a Dios. Sólo Él es digno y no cualquiera de sus siervos (Ap 19, 10). No debemos adorar a los santos, ángeles, creaturas, etc.

La palabra adorar proviene del término adoris del latín formado por el prefijo ad (hacia) más el verbo orare (hablar). Adorar es pues, en su etimología, hablar hacia Dios o a Dios.

Adorar, según un diccionario, significa rendir culto a alguien o a algo que se considera como divinidad o que está relacionado con ella; según otro diccionario adorar es reverenciar y honrar a Dios con un culto religioso. Por tanto adorar es un acto de culto espiritual a Dios.

7/07/2020

El infierno en la Biblia y los padres de la Iglesia

Fuente: Apologetica Catolica

Por José Miguel Arráiz

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Introducción

Es frecuente escuchar negar la existencia del infierno a miembros de sectas como los testigos de Jehová o adventistas del séptimo día. Para los católicos sin embargo, el infierno es dogma de fe.

A este respecto enseña el Catecismo de la Iglesia Católica:

“1033 Salvo que elijamos libremente amarle no podemos estar unidos con Dios. Pero no podemos amar a Dios si pecamos gravemente contra El, contra nuestro prójimo o contra nosotros mismos: “Quien no ama permanece en la muerte. Todo el que aborrece a su hermano es un asesino; y sabéis que ningún asesino tiene vida eterna permanente en él” (1 Jn 3, 15). Nuestro Señor nos advierte que estaremos separados de El si no omitimos socorrer las necesidades graves de los pobres y de los pequeños que son sus hermanos (cf. Mt 25, 31-46). Morir en pecado mortal sin estar arrepentido ni acoger el amor misericordioso de Dios, significa permanecer separados de El para siempre por nuestra propia y libre elección. Este estado de autoexclusión definitiva de la comunión con Dios y con los bienaventurados es lo que se designa con la palabra “infierno".”