3/23/2024

Marzo, dedicado a San Jose

«En aquellos días, el Carpintero enseñaba a rezar a Dios. 
Y hablaba con Dios cara a cara. 
Y miraba con sus ojos, los ojos de Dios. 
Y con Dios reía. 
Y Dios se dormía en sus brazos. 
Y Dios despertaba con su beso. 
Y Dios comía de su mano. 
Y oraba a Dios y le cantaba teniéndole en sus rodillas. 
Con sus manos tocaba a Dios y llevaba a Dios de la mano.  
Jugaba con Dios y Dios era feliz con él. 
Y ni en la Gloria había más gloria que en la casa de José»